El sábado día 5 de noviembre tuvimos partido del equipo juvenil contra el Cangas de Narcea.
Tras hora y cuarto de viaje hasta Cangas a cada uno de los jugadores nos dio tiempo a pensar todo aquello que podríamos hacer en un partido que se avecinaba fácil, pero como todos sabemos, en el baloncesto pueden pasar muchas cosas.
Al llegar al polideportivo tuvimos que esperar un rato antes de poder comenzar a calentar, debido a un retraso de un partido anterior, pero nuestra concentración continuaba fijada en el partido que íbamos a disputar.
El encuentro comenzó con bastante facilidad para nosotros. Y a medida que transcurría el partido nos sentíamos más seguros y el cansancio aumentaba en los oponentes, y lo supimos aprovechar.
La mitad del partido terminó con un resultado positivo y satisfactorio para nosotros.
Tras el descanso salimos al terreno de juego con las ideas más claras sobre los errores que habíamos cometido y decididos a aumentar la diferencia en el marcador, cosa que no nos fue del todo fácil debido a uno de los jugadores del equipo contrario que intentaba ajustar el resultado. Pero finalmente la victoria fue del École.
Veinte puntos arriba es un buen resultado, y la sensación de que cada vez somos más equipo y disfrutamos más, es lo mejor.
Tras el partido, los sacrificados jugadores fuimos a Oviedo a cenar y celebrar la victoria.
Pau Pierres Gay
Jugador del equipo Junior